- La edad de los menores está comprendida entre los 2 y los 13 años
- En muchos casos, la figura de un familiar adulto está detrás de las grabaciones
La Policía nacional ha identificado a más de un centenar de niños de entre 2 y 13 años que subían vídeos a sus redes sociales para conseguir más «likes», más aceptación y fans en el mundo virtual. Normalmente se grababan en su habitación mientras estaban solos o con amigos, en posiciones eróticas o masturbándose.
En un macrooperativo contra la difusión online de material sexual infantil autoreproducido, la Policía alerta de esta moda, que lo único que hace es posicionar al menor como carne de cañón para los pedófilos.
La mayoría de los padres desconocen estos hechos, pero en el caso de los más pequeños está detrás la participación de algún adulto del entorno familiar, según aclaró la inspectora Cecilia Carrión.
Los policías manifestaron que en su mayoría, los niños no tenían conciencia de lo que estaban haciendo, que únicamente buscaban nuevos seguidores en plataformas virtuales como Instagram, Youtube o Periscope. Sin embargo, se han detectado casos, en el marco de la investigación, en los que varios adultos habían contactado con ellos solicitándoles estos vídeos a cambio de diferentes contraprestaciones.
Esta macro operación pudo realizarse gracias a una alerta recibida desde el Centro Nacional para Menores Desaparecidos y Explotados (NCMEC) de Estados Unidos, una entidad con la que colabora España y que avisó de un aumento de distribución de estos materiales en redes sociales desde principios de 2018.