Dentro de las instalaciones había una vaca y dos terneros, que son las únicas víctimas de este incendio. La fuerte carga térmica, con la cantidad de hierba seca que se acumulaba en el interior, prolongaba los trabajos de extinción, pues fue necesario sacar el material, enfriar y apagar.
Desde las nueve de la mañana de este domingo, cuando se activó la alarma en el 112 Galicia, operaron en el lugar de los hechos, varias dotaciones entre Bomberos de San Cibrao, GES de Maceda, Protección Civil, Central de Incendios Forestales de la zona y Protección Civil de Parada de Sil, junto con los agentes de la Guardia Civil.
Con todo, y a pesar de que se perdieron tres ejemplares, el grueso del ganado se salvó del incendio por estar fuera de la instalación en el momento en el que se produjo el suceso.