El Gobierno alemán ha presentado una estrategia nacional de seguridad que aborda no solo temas de defensa, sino también cuestiones relacionadas con el suministro de materias primas, la seguridad energética, la seguridad alimentaria y el cambio climático. El canciller, Olaf Scholz, destaca que es la primera vez en la historia del país que se desarrolla una estrategia integral de seguridad que abarca todos los aspectos relacionados con la misma. El documento reconoce a Rusia como la principal amenaza actual, pero también considera el desafío que representa China y la importancia de evitar una dependencia excesiva de un solo socio comercial en bienes estratégicos.
La estrategia busca involucrar a todos los niveles de la administración pública y a la sociedad en su implementación, destacando la necesidad de un enfoque europeo para lograr el éxito. La ministra de Exteriores, Annalena Baerbock, subraya que la seguridad no se limita solo al aspecto militar, sino que también abarca otros aspectos de la vida diaria, como el acceso a medicamentos seguros, la protección de la privacidad en las redes sociales y la prevención de la manipulación en línea.