- La Ordenanza reguladora del tráfico, la movilidad y la seguridad viaria en el ayuntamiento de Carballo ya está aprobada definitivamente con las modificaciones introducidas a raíz de las alegaciones presentadss en el período establecido con esa finalidad.
La nueva ordenanza recoge en su mayor parte aspectos ya previstos en la anterior pero introduce novedades encaminadas y mejorar la seguridad peatonal, que es el gran objetivo. Una de ellas es la reducción de las velocidades máximas en algunas vías. De este modo, en las calles urbanas de plataforma única no podrán superarse los 20 Km/hora, una medida que ya está vigente en Valle-Inclán, Martín Herrera o Desiderio Varela, por ejemplo; mientras que en el resto de las vías urbanas el límite será de 30 Km/hora.
Este jueves comenzó la instalación de las señales que advertirán a los conductores en todas las vías de acceso a Carballo de que entran en una ciudad 30. De este modo Carballo pretende sumarse la un movimiento cada vez más extendido en Europa que, según parece, está comprobado que mejora la calidad de vida de la ciudadanía en los siguientes aspectos:
- Reduce atropellos y la gravedad de lesiones en caso de que se produzan
- Disminuye el nivel de ruído procedente del tráfico
- Facilita la integración del tráfico ciclista en la calzada
- Reduce la emisión de contaminantes procedente del tráfico
- Reduce la necesidad de semáforos y señales: menor mantenimiento y menor contaminación visual
- Favorece la disuasión del uso del vehículo motorizado
- Facilita la creación de zonas con prioridad peatonal y zonas de coexistencia, sin segregación entre aceras y calzada.
En el resto del viario municipal se establecen también 30Km/h para las denominadas travesías de núcleo, aunque si cuentan con aceras o arcenes laterales para peatones y ciclistas se amplía hasta 40 Km/ h.
Uno de los objetivos de la ordenanza es la promoción de la movilidad sostenible, basada en la prioridad de los modos de desplazamiento, por esta orden: a pie, en bicicleta, transporte público y de mercancías y transporte privado. En ese sentido, las medidas establecidas tienden a “facilitar la movilidad de la ciudadanía, sobre todo de los peatones, ciclistas y viajeros de transporte colectivo”, calmar el tráfico para ganar en seguridad y reducir “al máximo el número de accidentes y víctimas”, ordenar el tráfico de reparto de mercancías para causar el menor perjuicio a vecindario y adecuar la red viaria y la ordenación del tráfico para la consecución de esa movilidad sostenible.
La ordenanza da respuesta a las necesidades creadas la raíz de la transformación del espacio público, regulando, por ejemplo, la utilización de las vías de plataforma única o la circulación de vehículos de movilidad personal (VMP), que, con carácter general, tienen una consideración similar a la de las bicicletas y no podrán circular por aceras ni zonas peatonales. Las condiciones concretas previstas para cada medio de locomoción, así como el resto de los aspectos regulados en la ordenanza (impacto ambiental, autorizaciones, normas de circulación urbana, señalización, carga y descarga, uso y actividades en la vía pública, parada y estacionamiento o el régimen sancionador, entre otros) pueden consultarse en la ordenanza que se adjunta al final de esta noticia.