A las 13:00 horas de este martes Naturgy realizó la voladura de la caldera de su antigua central térmica en Meirama. Apenas varios segundos y 1.214 kilos de dinamita fueron suficientes para poner fin a la ultima gran instalación de la térmica cercedense. En base a un protocolo de emergencias previamente establecido, con desalojo de varias viviendas y corte de la carretera, cayeron la enorme caldera, el montacargas y los ascensores anexos. Junto con los silos de ceniza desaparecen definitivamente la que fue una de las mayores plantas de producción de energía del país, con una potencia bruta de 580 megavatios. La voladura de este martes es el epílogo a cuatro décadas de actividad, en las que la central fue el centro industrial de la comarca. Naturgy proyecta instalar en el mismo lugar una planta de producción de hidrógeno verde. En el escudo del ayuntamiento de Cerceda aun figura el dibujo de la central, con las dos torres ya desaparecidas.