Iván Espinosa de los Monteros, ha decidido dejar la dirección del partido de Santiago Abascal y renunciar a su escaño «por motivos personales y familiares», lo que abre una crisis en la cúpula de la formación, tercera fuerza en el Congreso, pero con menos diputados que en la anterior legislatura.
«Mis padres no son tan jóvenes, mis hijos no son tan mayores y, aunque actualmente todos están bien, he pasado suficientes noches en el hospital con ellos para meditar acerca del momento vital en el que me encuentro», ha empezado diciendo en una rueda de prensa en el Congreso, en la que ha ratificado lo que ya había anunciado previamente a sus compañeros de partido en un comunicado.
El que fuera ‘número tres’ en las listas de Vox por Madrid el pasado 23J, ha explicado su renuncia a recoger el acta en el Congreso en una comparecencia sin preguntas en la que no ha hecho ninguna referencia a los últimos resultados electorales del partido ni su línea política.
Según ha explicado, no abandona Vox -como se había dicho inialmente-, sino que se quedará como «militante de base» de la formación en la que milita desde que se fundó en el año 2013 y ha asegurado que estará «siempre a la disposición de los dirigentes» para «absolutamente cualquier cosa» que «necesiten» de él.