La superposición cuántica permite que los eventos se desarrollen en caminos paralelos, rompiendo con las barreras de la linealidad temporal de la física clásica. Esta peculiaridad, aplicada al almacenamiento de energía, lleva a la creación de una batería cuántica capaz de cargar dos dispositivos a la vez.
A través de un interruptor cuántico y diferentes configuraciones de carga, estos lograron enormes mejoras en la energía almacenada y la eficiencia térmica. «Además, revelamos un efecto contrario a la intuición: un cargador relativamente menos potente garantiza una batería cargada con más energía y con mayor eficiencia», informan los investigadores en su artículo», añaden.