Otro terremoto de magnitud 4,8 despertó la pasada noche no solo a los palmeros también a los vecinos de la mitad del archipiélago. La isla no ha dejado de temblar con más de 70 seísmos en la última jornada. Según los expertos, la isla gana altura. Cumbre Vieja va repartiendo su lengua de lava por las zonas que le faltaba por reducir a cenizas. Las continuas roturas del cono están alimentando la fuente de lava que fluye por la isla. Uno de los lugares amenazados por los desbordamientos de la lava es el cementerio de los Llanos de Aridane. Ahora está cerrado y los entierros se están realizando en otros municipios. El párroco del municipio sigue atendiendo a sus feligreses en otros edificios a pesar de que dos iglesias de la localidad han sido engullidas por la lava. Unos edificios que ya forman parte de las más de 2160 construcciones que ha liquidado el volcán, que ya ha arrasado más de 908 hectáreas.