Entre octubre y diciembre, el Producto Interior Bruto (PIB) sumó un 0,2 % trimestral, lo que permite cerrar el año con un crecimiento del 5,5 %, tal como se recoge en el dato adelantado este viernes por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Esta cifra se sitúa por encima de las previsiones del Gobierno (4,4 %) y del resto de organismos económicos como el FMI, la OCDE o el Banco de España, que pronosticaban que el PIB español se situaría en el entorno del 4,5 %. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha celebrado esta mejora del PIB frente a las previsiones económicas, lo que a su juicio confirma «la solidez y resiliencia de la economía española». El Ministerio de Asuntos Económicos, por su parte, valora que «la demanda interna ha aguantado bien el impacto de la inflación y de la subida de costes», con un crecimiento del consumo privado y de la inversión por encima del 4 %.