Las fuerzas israelíes entraron en el hospital Al-Shifa de Gaza el miércoles por la noche tras un largo asedio y dijeron que estaban llevando a cabo una «operación precisa y selectiva» contra militantes de Hamás a pesar de que el hospital estaba lleno de cientos de pacientes y personal médico. Horas antes, el portavoz del Pentágono, John Kirby, apoyó las afirmaciones israelíes de que Hamás estaba utilizando el hospital de Al-Shifa como centro de mando.
«Puedo confirmarles que tenemos información de que Hamás y la Jihad Islámica Palestina utilizaron algunos hospitales en la Franja de Gaza, incluido el de Al-Shifa y túneles debajo de ellos para ocultar y apoyar sus operaciones militares y mantener rehenes», declaró John Kirby, portavoz del Consejo de Seguridad Nacional. Por su parte, Hamás sigue negando las acusaciones israelíes de que utiliza hospitales, en particular Al-Shifa, para ocultar o apoyar sus operaciones militares y mantener rehenes.
La situación en los demás hospitales de Gaza también es grave: la ONU dice que 22 de los 36 hospitales de la Franja no funcionan debido a la falta de combustible para los generadores y los daños ocasionados por los combates. Los 14 hospitales que permanecen abiertos apenas tienen suministros suficientes para realizar cirugías críticas y que salvan vidas.