La última comunicación con los repetidores se produjo a las dos y media de la mañana del 28 de abril en una plaza de la localidad de La Laguna, horas después que el aparato fuera geoposicionado a bordo de su embarcación. Esta revelación hace verosímil la hipótesis de que Tomas Gimeno había huido aunque sea una posibilidad remota. La jueza de instrucción se inhibió en favor de un juzgado específico de violencia machista que se hace cargo de la investigación. En todo caso se mantiene la orden internacional de busca y captura para el padre de Anna y Olivia. La Guardia Civil decidió abrir una investigación interna para revisar la actuación policial desde que se inició el caso y determinar si hubo errores por ejemplo por no haber detenido al padre antes de la desaparición.