Los bombardeos rusos matan a 10 personas en Jersón y dejan 55 heridos, marcando los 10 meses desde el inicio de la invasión. Mientras tanto, el Gobierno ruso impuesto en Mariúpol instaló un enorme árbol de navidad en la ciudad.
El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, ha querido mandar un mensaje de apoyo a la población afirmando que ningún dron suicida logrará apagar la estrella de Belén.
Aguantamos al principio de la guerra. Sufrimos ataques, amenazas, chantajes nucleares, terror, ataques con misiles. Aguantemos este invierno porque sabemos por lo que luchamos, aseguraba el mandatario.
Mientras tanto el frente de Járkov, sigue activo y continúa la contraofensiva ucraniana, cuyo ejército trata de mantener posiciones. La equipación y proyectiles rusos abandonados tras el avance ucraniano, son utilizados ahora por las tropas del país.