Una oleada de ataques rusos con drones y misiles, la más intensa de los últimos meses, ha causado más de una veintena de muertos, numerosos heridos y daños en diversos puntos de Ucrania, incluida la capital, Kiev, y los mayores núcleos urbanos del país.
«Hoy Rusia ha usado casi todos los tipos de armas de su arsenal: (misiles) Kinzhal, S-300, misiles de crucero y drones. Los bombarderos estratégicos lanzaron misiles X-101 y X-505», escribió el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, en la red social X. Un total de 122 misiles «fueron lanzados contra Ucrania, la mayoría de los cuales fueron derribados», añadió.
Entre las infraestructuras dañadas por la oleada de ataques, citó un hospital de maternidad, centros educativos, un centro comercial, bloques de apartamentos, un almacén comercial y un aparcamiento.
El comandante de la Fuerza Aérea ucraniana, Mykola Oleshchuk, escribió en su canal oficial de Telegram que se trata del “ataque aéreo más intenso” desde el comienzo de la invasión rusa de Ucrania en febrero de 2022.