En Europa se registran unos 37.000 millones de euros anuales de inversión en investigación, y cerca de 800.000 puestos de trabajo directos creados por la innovación farmacéutica. En los últimos 20 años, se ha perdido cerca del 25 % de la inversión global en I+D en Europa. Un laboratorio francés creado en Marsella ha abierto sus puertas a nuevas terapias de vanguardia contra el cáncer. Unas 200 personas trabajan en él, en lo que se llama ‘inmunoterapia del cáncer’. Su objetivo es inducir a nuestro propio sistema inmunitario a reconocer y eliminar las células tumorales.
«Lo que hacemos es estimular el sistema inmunitario, que es un conjunto de defensas del organismo contra los virus, las bacterias, así como, también, contra el cáncer. Tratamos de estimular este sistema inmunitario para que, a cambio de ello, pueda ocuparse del cáncer; de todo tipo de cánceres, ya sean leucemias, linfomas o tumores sólidos», declara Eric Vivier, director científico de Innate Pharma.
Fundada en 1999, la empresa está desarrollando varios tratamientos oncológicos. Uno de ellos, contra el cáncer de pulmón, se encuentra ya en la fase 3 de sus ensayos clínicos, no muy lejos de su autorización definitiva. Como en otras pymes europeas, en la compañía la innovación es el objetivo final. Pero… el camino es largo, y a menudo tortuoso.