Este año no pudo ser, los Premios Princesa de Asturias no se entregaron en el Teatro Campoamor, la entrega se llevó a cabo en el Hotel Reconquista. Fue un acto sin público y con abundancia de discursos grabados, como los de la poeta canadiana Anne Carson, Premio de las Letras o del compositor John Williams, Premio de las Artes con el fallecido Ennio Morricone. Carlos Saínz recogió su galardón de los Deportes animando a los chicos a perseguir sus sueños. La emoción afloró en la entrega del premio a la Concordia, encarnado en una quincena de sanitarios, algunos de ellos parientes de fallecidos por la Covid-19.
En el discurso de la Princesa Leonor estuvo presente la pandemia. Tuvo un recuerdo para los enfermos y fallecidos y destacó algunas de las lecciones que deja para los más jóvenes: «la pandemia que vivimos en España y en el resto del mundo alteró nuestra vida en muchos sentidos. Pero si hay algo que mi hermana Sofía y yo aprendimos es el sentido de la responsabilidad, y creo que los jóvenes de mi generación también son conscientes de eso». El rey instó a los poder públicos a conducirse con la máxima integridad y haciendo de los intereses generales su norte.