Los bomberos comarcales de la Galicia, en huelga desde junio y que la semana pasada decidieron dar libertad a los trabajadores para secundar o no el paro, continúan su calendario de movilizaciones este lunes 23 de octubre con una concentración ante la Diputación de Ourense. Más de 200 efectivos participaron en esta nueva protesta, entre gritos de “dimisión”, lanzando pintura a la fachada del edificio y quemando neumáticos frente al mismo, en el centro de la calle Progreso. Una manifestación que llega después de que la pasada semana se manifestaran ante la Diputación de Pontevedra para demandar mejores condiciones. En la movilización de Ourense hubo momentos de tensión tras una carga policial que dejó varios bomberos heridos.
Los más de 200 bomberos se concentraron ante la puerta de la sede institucional, donde se encontraban decenas de antidisturbios que iniciaron las cargas contra el personal movilizado. Uno de los bomberos resultó herido en la nariz al ser golpeado por un agente. Según fuentes de los bomberos, sufrió una rotura del tabique nasal, por lo que fue llevado en ambulancia al Complejo Hospitalario Universitario de Ourense y espera del parte de lesiones.
Peticiones
Pocos minutos después el comité de huelga presidido por Ángel Moldes, de la CIG, fue recibido en la institución provincial ourensana por el presidente, Luís Menor. Entre sus peticiones, un convenio colectivo, a nivel gallego, unificado para todas las circunscripciones segundo su profesión; fijeza en el empleo de acuerdo con la doctrina del Tribunal Supremo de enero de 2022; mayor dotación de medios técnicos, y mayor dotación de recursos humanos. El calendario de movilizaciones continuará el 27 de octubre frente a la Diputación de A Coruña y el 31 de este mismo mes ante la Diputación de Lugo. También han previsto una manifestación el 17 de noviembre en Santiago de Compostela.