Los hechos se produjeron entre las localidades de Marín y Pontevedra, en el lugar de Cunchidos, en la zona de Estribela. Según fuentes próximas a la investigación, la víctima, de 33 años, y el agresor se conocían, pero no mantenían una relación sentimental, por lo que no se trataría de un caso de violencia de género. Se investiga cómo un posible ajuste de cuentas por drogas. El hombre fue detenido por la Policía Local de Marín y la Policía Científica trabaja para esclarecer lo ocurrido. El crimen ocurrió en el interior de una infravivienda, con mantas en las ventanas y evidentes condiciones de abandono. La propietaria del inmueble falleció hace años y este quedó deshabitado, convirtiéndose en punto de encuentro para varias personas en situación de pobreza y exclusión social.
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