En ambos casos fue necesaria la intervención de los equipos de salvamento al estar las víctimas atrapadas nos sus vehículos.
El más reciente se produjo en Barro, en la confluencia entre la PO-531 y la AG-41, en Curro. En ese punto, un turismo se salió de la vía, y el único ocupante resultó fallecido. Así lo confirmaron los equipos de intervención una vez posicionados en el lugar del siniestro.
Para movilizar los recursos necesarios, fue fundamental la llamada al 112 Galicia de un particular. La posibilidad que apuntó el alertador de que hubiera alguien atrapado en el vehículo, hizo que si avisara a los Bomberos de Pontevedra, Morrazo, y GES de Sanxenxo.
Al lugar acudieron una dotación de Urgencias Sanitarias de Galicia-061 y una patrulla de la Guardia Civil de Tráfico. Precisamente, los agentes de seguridad avanzaron el estado de la víctima.
Anteriormente, una persona perdía la vida en Ribadavia tras un colisión entre un turismo y un camión de cambios. El siniestro se produjo en la O-504, al paso por la parroquia de Regodeigón, tal y como indicaron las personas que llamaron al 112 Galicia para pedir ayuda.
Con estos datos, se activaron los protocolos necesarios para la movilización de recursos de salvamento como los Bomberos de O Carballiño y miembros del GES de Ribadavia. También fueron informados, por supuesto, los profesionales de Urgencias Sanitarias de Galicia-061, que mismo trasladaron un equipo a bordo del helicóptero medicalizado con base en Ourense. Sin embargo, nada pudo hacerse por recuperar la persona.
De este modo, los bomberos procedieron a su liberación, pues estaba atrapada dentro del coche, pero ya estaba fallecida. Además, en este operativo colaboraron los agentes de la Policía Local de Ribadavia, así como la Guardia Civil de Tráfico.