El regidor, Iago Toba, calificó esta celebración, debido a la petición de BNG e Independientes por Muxía, como un “gasto innecesario para el vecindario los 600 euros que cuesta realizar este pleno extraordinario, cuando todo se podría haber aprobado la próxima semana, en la que ya estaba programado un pleno ordinario”.
Toba considera “un error que en los fuercen a convocar este pleno para aprobar unas obras que sha estaban aprobadas previamente y, mismo en caso alguno, adjudicadas”.
Toda la corporación votó a favor de todos los puntos del orden del día ya que, según indica el regidor “no vamos a votar nunca en contra de ninguna propuesta que signifique la mejora para nuestro municipio, pero sí que sentimos que estos grupos políticos no tengan más rigor a la hora de realizar una propuesta plenaria seria”.
Por último, el dirigente municipal asegura “sentirse perplejo ante la falta de conocimiento de los grupos convocantes del sistema democrático de plenos y comisión informativas, que mismo dieron a entender que se limite el derecho de información para comisiones generales, de urbanismo, etc. Una actitud y una propuesta totalmente contraria a la ley y mismo votada de manera favorable en el pleno organizativo”.
El ejecutivo local aprovechó el turno de ruegos y preguntas para solicitar al partido de Independientes por Muxía “que dejen de crispar al vecindario”.