Blinken ha aterrizado este domingo en Turquía para comprobar el estado de las zonas afectadas por el terremoto del pasado seis de febrero, quiere mostrar su solidaridad con los damnificados y dar el pésame a la familias.
La agenda del primer día incluyó la provincia de Hatay y la periferia de la ciudad de Adana. También se vio con los equipos de rescate enviados por su país y con la organización siria Cascos Blancos, y se entrevistará con su homólogo turco, Mevlüt Çavusoglu, en Ankara.
Es la primera visita de Blinken a Turquía, tradicional aliado de Estados Unidos en la OTAN, pero con el que la Casa Blanca mantiene tensiones diplomáticas desde hace años. La siguiente parada de su viaje será Grecia, tras haber participado también en la Conferencia de Seguridad de Múnich. Hasta el momento el seísmo ha dejado 45.000 muertos, 40.000 en Turquía.