El cambio climático lleva años afectando claramente la Península Ibérica. El que era una sensación obvia viene avalada por numerosos datos y estudios, también de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) que, junto con el Ministerio para la Transición Ecológica, presentó esta semana un avance del proyecto Open Data Climático, donde se recogen algunas de las evidencias del impacto del calentamiento global en las cuatro últimas décadas. Otras son la desestacionalización de los incendios y el empeoramiento de unas condiciones que favorecen la expansión de las llamas y la mayor peligrsidad del fuego, tal y como advirtieron en los últimos años otros informes referentes al riesgo del fuego en Galicia o Portugal.
Esta otra advertencia de la Aemet sobre el impacto del cambio climático llega la finales de marzo, con varios incendios activos en Galicia y uno de enormes dimensiones – casi mil hectáreas quemadas – que afecta a Dodro y Rianxo. Con elevadas temperaturas para la época, fuertes vientos y un monte y vegetación descuidado que ejercen de perfecto combustible. Una vez más.