Un atentado suicida en una mezquita de Peshawar, en Pakistán deja al menos 61 muertos. El terrorista detonó su artefacto explosivo cuando unos 200 fieles se habían reunido para rezar. Decenas de personas han resultado heridas. Se cree que muchas de las víctimas son agentes de policía, ya que la mezquita se encontraba en un extenso recinto que también sirve de comisaría. Los testigos afirman que la fuerza de la explosión provocó el derrumbe del tejado, lo que dificultó las labores de rescate. Según la policía, no se ha reivindicado inmediatamente la autoría del atentado, pero otros atentados similares ocurridos anteriormente fueron atribuidos a los talibanes paquistaníes.