El domingo 4 de junio cuatro novillas de un afiliado del Sindicato Labrego Galego-Comisións Labregas (SLG-CCLL) aparecieron muertas al lado del perímetro del polígono industrial eólico de Sotavento, en la provincia de A Coruña, después de que durante uno tormenta se hubiese producido un fuerte relámpago en esa zona, confirmado por el registro de Meteogalicia en ese punto. La Secretaria General del SLG, Isabel Vilalba, encaminó una solicitud dirigida a las Consellarías de Industria y Medio Rural urgiéndolas a desarrollar las acciones precisas para aclarar el origen y circunstancias en las que tuvo lugar este suceso, que podría haber afectado a tres ganaderos que se encontraban trabajando en el entorno, al tiempo que instó a la Xunta de Galicia a hacer valer el principio de precaución activando la paralización cautelar de todos los polígonos industriales eólicos actualmente en construcción hasta que sea aclarado este incidente.
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