Al parecer, una joven llamó la Policía Local en la madrugada del domingo desde la calle Santiago del Estero, en la zona de copas del ensanche compostelano.
Decía que se sentía mareada y que creía que había recibido un pinchazo en la pierna. Supuestamente, la mujer se desplazó hasta el Hospital Clínico, donde se activaría el protocolo de atención a las posibles víctimas de sumisión química.
Por el momento no consta denuncia en la Policía Nacional, pero sí están abiertas diligencias para investigar el sucedido.
Este posible caso se produce justo cuando el Ayuntamiento de Santiago y la Asociación de Hostelería ultiman un protocolo para proteger las víctimas cuando haya sospechas de agresión en los locales de ocio nocturno. La intención es que esté en marcha para las fiestas del Apóstol.