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Tras cinco años sin visitar China, el secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken, inició una visita de dos días al país asiático en un contexto de sanciones comerciales, pugna tecnológica, juegos de espías y peligrosas maniobras militares. Blinken se reunirá con el principal diplomático de Pekín, el excanciller Wang Yi. De momento, no se ha confirmado si Blinken podrá reunirse con el presidente Xi Jinping. El canciller chino declaró que las relaciones entre ambas potencias se encuentran en su momento más bajo y formuló las exigencias de China, incluida la cuestión de Taiwán.