Mike Daum se disfrazó de héroe salvador, y con un suave palmeo, a menos de 2 segundos del final, daba la victoria al Obradoiro este sábado en Sar. Sexta victoria ante Montakit Fuenlabrada por 78-77, otro rival directo, en un nuevo final de infarto. Y es que los partidos del Obradoiro deben contar con cardiólogos de urgencia pues sus finales acostumbran a generar taquicardias y alto riesgo de infarto.
Empezaba el partido con un Magee fallón. Al Obradoiro le costó entrar. Aparecía un “entre algodones” Álvaro Muñoz, duda hasta última hora, quien encendía a Caldeira con 2 triples. Ajustaba el equipo local su defensa y cerraban el primer cuarto con un 19-11.
El Obra se veía superior pero no “mataba”. Ventajas en unos contra uno claras no eran aprovechadas por los gallegos, quienes buscaban posesiones largas y circulación extrema. Bobrov imponía su fuerza y los de Santiago no se escapaban en el marcador.
Se produce entonces la jugada clave de este segundo cuarto, clarificadora de la situación. Antes de enfilar el camino de vestuarios, los fuenlabreños, de la mano del mvp del partido Marc García (16 puntos, 6 rebotes, 2 asistencias para firmar 26 de valoración) anotan un triple tras una jugada en la que llegan a coger hasta cuatro rebotes ofensivos. Obradoiro no era capaz de coger una ventaja amplia pese a jugar bien, 38-32.
Tras el descanso salía Fuenlabrada fortísimo, con una marcha más que el Obradoiro, quien se mostraba titubeante. Empataban los de Jota Cuspinera en menos de 2 minutos, parcial de 0-6 de salida y 38-38 de la mano de Bobrov y Rowland.
Fuenlabrada dejaba claro que el partido no iba a ser un paseo campestre para los compostelanos, y que iban a pelearlo todo. Dicho y hecho pues los visitantes eran más intensos, gestionaban mejor las faltas y se agarraban al partido sin tregua. De la mano de un buen Bellas y los puntos de Rowland (15 puntos) y García (16 puntos) ponían en serios aprietos a los de casa, donde Kravic (11 puntos, 7 rebotes y 13 de valoración) y Brodziansky (18 puntos, 4 rebotes y 24 de valoración) mantenían al Obradoiro en la brega y con una ligera ventaja, 57-55 minuto 30.
Llegábamos al último cuarto con las espadas en alto. Aparecía Czerapowicz con 2 triples para levantar a los de Santiago, 64-61 minuto 33. Pozas lideraba al equipo de manera sensacional, pero acabo con 5 personales, al igual que Brodziansky y Czerapowicz, no pudiendo acabar el partido faltando 2 minutos.
Obradoiro ganaba de 6 puntos y 2 errores, un triple de Eyenga, mal defendido y una inexplicable pérdida de balón de un Calloway desconocido que parecía esconderse volvían a poner la máxima igualdad en el electrónico.
Daum anotaba una canasta vía instant replay, el cual invalidaba un tapón ilegal de Eyenga. Respondía Rowland con un 2+1, poniendo un peligrosísimo 76-77 para los de la Comunidad de Madrid. Balón para Obradoiro que inexplicablemente no sube su base Calloway y en medio campo es botado por el pívot Kravic. Llega el balón a manos de Muñoz que se juega un triple, errándolo. Sin embargo, es justo ahí donde aparece la mano salvadora de Mike Daum “Dauminator” que palmea dentro del aro a falta de menos de 2 segundos.
Último intento para los visitantes que sacan de banda. Rowland se faja muy bien de su defensor pero falla su tiro. Fin del partido y la victoria que se queda en casa.
Así como hace una semana en Gran Canaria, salía cruz, ayer, salió cara y Obradoiro se aleja de los puestos de descenso, acecha los que dan pasaporte a la copa, donde mayor atasco hay, y aumenta su racha de victorias seguidas en casa a 3.
Próximo partido repite Obra como local, sábado 28 a las 18h. Cita con Movistar Estudiantes, otro rival directo, para intentar acabar el año en una muy buena situación. De momento, Obradoiro y su afición comerán el turrón en paz y sin sobresaltos clasificatorios, ya que en lo referente a la conclusión de los partidos, el carrusel de emociones extremas está más que garantizado.
ALEJANDRO LUIS OTERO JAMARDO