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El ya primer ministro del país nórdico, el conservador Petteri Orpo, juró ante la Eduskunta un cargo con el que se pone al frente de una coalición de cuatro partidos. Entre ellos está el ultraderechista y antiinmigración Partido de los Finlandeses, lo que supone en definitiva un importante giro político para el país. El nuevo Gobierno está considerado el más de derechas de la historia reciente del país nórdico. Tras ganar las elecciones del pasado mes de abril, Orpo, de 53 años, toma el relevo de Sanna Marin, cuyo partido Socialdemócrata quedaba relegado a la tercera posición. La reforma de Orpo incluye entre otras cosas más austeridad, bajadas de impuestos y menos inmigración.