- El Fondo GaLlego de Cooperación y Solidaridad, del que es socio el Ayuntamiento de Carballo, financió la iniciativa de la ONGD Asamblea de Cooperación por la Paz
La ONGD Asamblea de Cooperación por la Paz y el Fondo Gallego de Cooperación y Solidaridad, entidad de la que el Ayuntamiento de Carballo forma parte, les facilitaron el abastecimiento de agua a los 1.824 habitantes de la localidad de Carantaba, en el norte de Guinea-Bissáu. El proyecto incorporaba un taller de introducción a la fotografía para las vecinas cuyo resultado puede verse en la exposición ‘Mindjer dice Guiné’, que se expondrá en la biblioteca Rego da Balsa hasta el 29 de noviembre, mes en que se conmemora el Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres. El horario de apertura es de lunes a viernes de 10.30 a 20.30 horas y los sábados hasta las 13 horas.
La muestra reúne veinte instantáneas realizadas por las dieciséis participantes en la formación, impartida por el fotoperiodista Sylvain Cherkaoui. Las imágenes ponen en valor a interpretación que ellas hacen del mundo, de su comunidad y de la cooperación internacional. Cámara en mano, las autoras captaron desde situaciones cotidianas hasta la repercusión que los proyectos de desarrollo tienen en sus vidas. De este modo, las fotografías permiten empatizar con la realidad del país lusófono desde el punto de vista de su población, que lucha por seguir avanzando en condiciones muchas veces poco favorables.
A través de su convocatoria de ayudas para ONGD, el Fondo Gallego acercó 50.000 euros al proyecto formulado por ACPP, que permitió garantizar el derecho humano al agua de la población de Carantaba mediante la rehabilitación de un pozo con sistema de bombeo electrosolar, la construcción de dos depósitos de altura y la instalación de una red de distribución con unos 1.000 metros de canalizaciones. Además, se dispusieron cuatro fuentes públicas y dos tomas domiciliarias, una en la escuela y otra en la residencia del profesorado.
La actuación llevó aparejada una campaña de sensibilización sobre prácticas higiénicas que se extendió no solo a la localidad de Carantaba, sino también a las comunidades de Santa Curtiba y Santa Nie, llegando la cerca de 3.000 personas.